En España, el inicio del estado de alarma supuso que los españoles fuéramos a comprar como poseídos papel higiénico, gel antibacterial o productos como la pasta, el arroz o las cervezas. En Países Bajos, el anuncio por parte del gobierno de que iba a cerrar los coffee shops, lugares donde se puede comprar legalmente marihuana y otro tipo de opiáceos, durante al menos tres semanas ha desatado la locura entre los consumidores.
El Gobierno había anunciado que paralizaría totalmente la actividad comercial, incluido los citados coffee shops además de proceder al cierre de bancos, escuelas, restaurantes y clubes deportivos. Holanda cerraba hasta el 6 de abril las ciudades de Amsterdam, Rotterdam y Utrecht, las mismas urbes que han visto las enormes colas de gente esperando para comprar sus dosis recreativas de marihuana para hacer frente a la cuarentena.
No obstante, según cuenta el Daily Mail, el Gobierno holandés, viendo las consecuencias de su decisión, ha decidido matizar la medida y acaba de anunciar que los coffee shops permanecerán abiertos, aunque solo para la recogida de pedidos.
Los ‘coffee shops’ solo están autorizados a vender drogas blandas y siempre en cantidades de no más de cinco gramos de cannabis por persona al día, además no está permitida la venta a menores de 18 años.