El gobernador de Colorado, John Hickenlooper, firmó hoy de una nueva ley que autoriza al estado destinar varios millones de dólares de fondos públicos para investigar los beneficios del consumo de marihuana con propósitos médicos, especialmente en los casos en los que los tratamientos tradicionales no resultan eficaces.
La ley SB14-155 o Ley de Subsidios para Estudios de los Efectos Médicos de la Marihuana, indica que, aunque en la actualidad unos 100.000 residentes de Colorado ya usan marihuana medicinal, un número aún mayor podría hacerlo si se determinase que ese uso provee «beneficios terapéuticos» en casos de «condiciones médicas debilitantes».
Por eso, el estado de Colorado otorgará 10 millones de dólares a agencias de salud gubernamentales para realizar estudios, observaciones y pruebas clínicas que, según indica la ley, podrían llevar a que el gobierno federal modifique las normas vigentes que restringen el uso de marihuana incluso con propósitos médicos.
«Los medios recientemente publicaron muchos ejemplos extraordinarios de cómo la marihuana ayuda a las personas, incluyendo niños con epilepsia, veteranos con síndromes postraumáticos y pacientes con enfermedades incurables», dijo el director ejecutivo del Marijuana Industry Group (MIG), Mike Elliot.
«Pero a la vez el gobierno federal se niega a reconocer el valor medicinal del cannabis, a pesar de la abrumadora evidencia al contrario», agregó.
Esa inacción del gobierno federal, opinó Elliot, llevó a que los legisladores de Colorado «se decidiesen a actuar para promover la salud y la seguridad».
Entre esos legisladores figuran cuatro hispanos, todos ellos demócratas, que son las senadoras estatales Irene Aguilar y Lucía Guzmán y los representantes estatales Dominck Moreno y Crisanta Durán, esta última coautora del proyecto de ley.
Según Durán, su respaldo a la propuesta se debió a que la nueva ley «ayudará a que los médicos entiendan mejor los efectos bioquímicos de la marihuana recetada».
Para Elliot, además de ayudar en casos de epilepsia infantil y síndromes postraumáticos, la marihuana también podría aliviar los síntomas de la esclerosis múltiple, especialmente en casos en los que los pacientes «ya no tienen otras opciones».
La ley, sin embargo, no asume que existan beneficios médicos del consumo de marihuana, sino que quiere establecer si esos beneficios son reales o no y, si lo son, en qué consisten, quiénes serían los beneficiados, de qué manera la marihuana causa esos efectos positivos, y cuáles serían los mecanismos y las dosis para administrar la marihuana.
Las investigaciones comenzarán inmediatamente y deben concluir antes del 1 de julio de 2019.
La meta es «reunir información científicamente objetiva» sobre el uso de marihuana en tratamientos médicos para que las autoridades estatales correspondientes puedan decidir dentro de cinco años cómo regular esos tratamientos.
Fuente: Televisa