Para todos nos son conocidos los famosos controles anti-droga, que más que querer que no consumamos drogas quieren recaudar debido a su ineficacia comprobada a la hora de medir si un sujeto es apto para la conducción.
Durante 2012, los conductores españoles se sometieron a más de 4.000 controles de drogas y el 60 por ciento dio positivo.
Un estudio del Instituto Nacional de Toxicología revela que casi la mitad de las víctimas mortales en accidentes de tráfico conducía bajo los efectos del alcohol y las drogas. La Guardia Civil de Tráfico realizó en 2012 más de 4.000 controles específicos para detectar el consumo de estupefacientes al volante.
El alcohol y las drogas suelen ser el principal motor de conductas temerarias como conducir en sentido contrario en una autopista o adelantar por el arcén sorteando el tráfico, poniendo en riesgo la seguridad de los conductores.
Sólo en Galicia, la Guardia Civil de Tráfico detecta cada mes 1.300 personas conduciendo bajo los efectos del alcohol. Realizan un millón de controles de alcoholemia al año e intensifican cada vez más los controles de drogas. Cuando un conductor es interceptado y da positivo en cocaína, su vehículo queda inmovilizado.
El narcotest detecta hasta seis tipos diferentes de sustancias estupefacientes. Tras una primera prueba, los agentes toman otra muestra confirmatoria del conductor para mandarla al Instituto de Medicina Legal de Santiago. Si se confirma el positivo, el conductor recibirá una sanción administrativa que llevaría consigo la sanción de 500 euros y la pérdida de seis puntos en su permiso de conducir.
Durante 2012, los conductores españoles se sometieron a más de 4.000 controles de drogas y el 60 por ciento dio positivo.
Fuente : Antena3